Monday, August 29, 2005

Así también se anuncia la primavera.



Suelen confundir la imagen de un hombre pájaro con la de un ángel, sin embargo las diferencias son notorias (tema de otro capitulo), cualquiera que haya pasado por las tierras mas allá del sur, luego de las millas de dunas, habrá entrado en las quebradas abismales. Son de alturas fabulosas sobre el mar, cubiertas de plantas rastreras y de flores enormes, Este es el terreno de los hombres pájaro, se protegen de las inclemencias climáticas en la grandes cuevas del arrecife, y rara vez se los ve caminar, o alejarse de las alturas sobre el mar, en ciertas épocas desaparecen, abandonando sus hogares y vuelan mar adentro perdiéndose en el sol de una mañana otoñal, para volver a aparecer los últimos días del invierno entre las nubes de algún atardecer, traen sus alas llenas de semillas y flores lejanas las que se adhieren a las paredes de sus cuevas y crecen tiñendo el paisaje.
Recuerdo la noche que los vi., yo flotaba en el mar negro y tibio, había aparecido en ese lugar después de un día agotador y ahora todo me parecía mas calmo pues flotar se me da muy bien.
Estaba a unos treinta metros de la costa viendo la brillante franja amarilla del horizonte. Bajo la bóveda del cielo una capa de nubes oscuras se movía rápidamente, y a mis espaldas las rocas despedían el aroma de la vegetación que crece con la bruma del mar.
Si no fuera por la suerte de haber despertado en ese lugar, jamás habría tenido oportunidad de verlos, estaban regresando, sobre mi entre las nubes negras, donde ocasionalmente se dejaba ver el cielo profundo, aparecieron volando dos de ellos, jugaban a algo al parecer, algo parecido a la pinta creo, un poco mas violento yo diría. Apenas se dejaban ver aunque su intención no era esconderse, tal vez solo volaban sobre las nubes para aprovechar la ultima luz del día, solo puedo decir sobre ellos que sus cuerpos son oscuros y bellos, yo me deje flotar de espaldas esperando despertar no tan pronto y algo emocionado por la certeza de que volvería recordando cada detalle.
Así también se anuncia la primavera.

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