La carpa azul

Como se podía ser como esos hombres que si la desgracia los atacaba y los reducía a una silla de ruedas echaban la silla a un lado y aprendían a depender solo de los brazos y se echaban a volar? Zozobraba un barco y los sobrevivientes, sin acabar de secar, colgaban el trapecio y se echaban al vuelo.
Los había visto luchar contra el viento furioso, empaparse hasta los huesos y chapotear en el fango. y cuando corría junto a ellos hacia la carpa destrozada iba calculando cuanto tardarían en levantarla. Por que estaba seguro de que lo harían.

2,1,,,0,,,1,2....

Apenas enfoco las cosas desde que comencé a sentir que existo.
El sonido del mar en mis oídos es el pulmón del mundo respirando su aliento hasta mi y mas.
La Luz de esta caverna es irreal, la luna dibuja todo.
Cerca de mí hay plumas enormes y una cama de hojas calida por mi propio cuerpo.
Todo lo que existe tiene un nombre en mi interior, aunque aun no he visto nada con estos nuevos ojos, todo esta claro dentro mío.
Llevo miles de años en el mundo siendo roca, mar y cielo.
Hoy soy más efímero.
El reloj de mi corazón me dice que es tiempo de comenzar a vivir.
Veremos que es lo que soy, veremos...

(29) Mi vida en las quebradas (Diario de Marco)

Los hombres alados no saben su edad, crecen solos y su vida infinita en las quebradas les trae recuerdos de sus juegos en la altura y de sus noches de tormentas.
En cambio ellos aprenden lentamente a presentir su fin, y entrados en la edad adulta ya sienten como las vueltas de su corazón se centran lentamente hacia el atardecer.
Un hombre alado conoce el día de su muerte y lo prepara de a poco, entrenando el alma aérea para dar cada paso que el corazón exija, cada viaje que sus alas piden, cada palabra nueva y cada sentimiento curioso.
Así van calzando los acontecimientos y limpiando su existir.
Así van preparando el camino hacia una tarde tranquila, en que con un poco de suerte y mucha sabiduría dejaran que el viento les cierre los ojos, concentrados en esas ultimas estrellas, a las cuales viajaran cuando el mundo se extinga y estén en paz para emprender su mas alto vuelo.

La claridad (sobre Korea y otros)

Que rompan todo, que se maten entre ellos, que terminen con los elefantes y las ballenas. Que terminen con los tigres y con los árboles que lo quemen todo y destruyan hasta el sol.
Puede que todo en este mundo se termine, pero les puedo asegurar que hoy mismo y desde hace cientos de miles de años, muy lejos de aquí, en todas las direcciones del cosmos hay planetas enormes, llenos de vida y en sus mares eternos las ballenas reinaran incluso millones de años después de que el ultimo ser humano olvide que significaba las palabras buenas como sol o mar.
Jamás tocaremos eso.

Mi vida en las quebradas (alma aérea)

Ahora el hombre alado mira su sombra larga y definida en la tierra seca bajo sus pies en el borde de las quebradas.
y todo lo que vivió le parece ajeno a ese dibujo de un ser humano verdadero.
“Bien por fin estoy aquí” piensa “Estoy mirando todo este horizonte frente a mis ojos nuevos. “
“Y mi nuevo pecho se hincha con el aire de la nueva primavera.
Todo lo que en mí a muerto esta de vuelta como un niño en la piel de ayer, y el horizonte me llama a mi”

El rito de vivir.

La sangre del sol al atardecer, enfriándose en el mar, colapsando suavemente.
Eso es solo otra promesa.
Hay que dejarse llevar por los signos a veces.
Hay que seguir el sendero oculto en lo evidente.
Hay que respirar al ritmo de la tierra girando al ritmo del sol.
Todo esto no es más que un ritmo del que no hay que bajar.
Hay que girar como todo. Y volver a comenzar.
La próxima función es volver a comenzar.
Hay que dar gracias por eso.