Tuesday, October 05, 2010

El sueño de un dios que no puede despertar.












Primero soñé con espacios infinitos donde nadaba en una oscuridad fría y cautivadora.
Luego imagine luz, tibia y acogedora, que hizo brillar mis pupilas hasta entonces ciegas.
La luz me abrió la mente a nuevas formas imposibles hasta entonces.
Vi planicies, acantilados, valles, mares, desiertos.
Mi sangre la derrame en agua, en vapor, en lluvia intensa.
Me concentre en disolverme, apasionado en mi creación.
Me desintegre y me multiplique.
Fui vida, otra vida igual y mejor que la mía.
Fui muerte.
Por primera vez entendí que lo único mejor que lo eterno es lo efímero.
Y así...
Me cuestione en la mente de millones de pensamientos que ya no me pertenecían.
Me descubrí también en ellos.
Con miles de formas, de colores y de reglas escritas en libros que jamás hubiera imaginado.
A veces creo que voy a despertar gritando.
Otras me deleito en el vuelo de un ave.
No sé cuándo ni cómo termina este sueño...
No sé cuándo ni como...
No se...
...